IGNACIO SAMPER VIÑAS
.Después de su cuarta presencia en la final Four y el subcampeonato de la Copa del Rey de baloncesto, al TAU cerámica le tocaba saborear otro título este año, el de campeón de la ACB. El pasado domingo lo consiguió tras ganar de forma contundente al AXA Barcelona (76-61) en su propia cancha. Ya lleva dos títulos ligueros el equipo de Vitoria que no partía como favorito en los playoffs por su discreta cuarta plaza durante la liga regular.
La pronta eliminación del Real Madrid y tras ganar a Pamesa y Unicaja en cuartos y semifinal, respectivamente, provocaron en los hombres de Neven Spahija la sensación de que esta podía ser su gran oportunidad. Frente a ellos se encontraron a un Barcelona que tampoco había brillado durante la fase regular, pero una vez que eliminaron al segundo gran candidato para hacerse con el entorchado liguero, el DKV Juventud (2º en liga), les convirtió en serios aspirantes al título.
Una aspiración que los blaugranas perdieron los dos primeros partidos de la serie en el Palau. De esta manera, dieron la opción a los vascos de hacerse con el campeonato en su propia casa y sus aficionados no faltaron a esta cita con la historia.
El baloncesto ha sido justo, el TAU ha jugado tres finales (Supercopa, Copa del Rey y ACB) y además ha participado por cuarto año en la Final Four. El técnico Spahija ha sabido dosificar a todos los jugadores durante una de las temporadas más largas para el conjunto vasco y al final la recompensa ha sido la segunda Liga ACB.
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